Lisbeth leyendo, de Carl Larsson (1853-1919).
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Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
13 comentarios:
Hmmmmm.... precioso.
¿Verdad? A veces pienso que por qué cuelgo simplemente un cuadro en el blog y ya está, sin añadir nada de mi cosecha, pero es que disfruto viéndolo, no necesito nada más.
Es que hay imágenes que hablan por sí solas. Esta transmite una calma y unas buenas vibraciones impresionantes.
Qué bonito!
Me encanta el cuadro de la pared.
Un besazo!
Es verdad, Cristina.
Acabo de mirarlo de nuevo y casi no veo nada del cuadro de la pared. Besos, Io
Hola Io: estoy haciendo experimentos a ver si me sale bien eso que me has explicado de los enlaces desde los comentarios.
Veamos, un enlace a una página que habla de Larsson:
Carl Larsson
Enlace conseguido.
Si cierro los ojos, me meto en el cuadro y me siento allí, al lado de la niña.
Dan ganas de hacerlo, ¿verdad? Ir con nuestra novela y sentarnos a su lado.
Me alegro de que ya puedas poner los enlaces directamente. La verdad es que queda mucho mejor.
Cuando hablaba del cuadro me refería a él como objeto, la perfección del marco, la presencia que tiene en la habitación, no a la pintura que, como dices, no se llega a identificar con claridad.
Un beso, guapa!
Ahora ya te entiendo. Y gracias de nuevo por el truco!!! Besos
MMMMMMMMMMM, POSIBLEMENTE MI FAVORITO DE LARSSON. Me parece originalísimo el enfoque, descuadrado, con ella que parece asomarse justamente para la toma. Con la misma importancia de ella y del entorno.
Sí, sin duda creo que es mi favorito de él, me parece absolutamente innovador.
UN BESOTE. ASOMADO
Hay bastantes encuadres muy originales en sus cuadros. Este está muy bien. Yo de momento no tengo uno favorito. Besos
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