Troncos de árboles en la hierba (1890), de Vincent van Gogh, Kröller-Müller Museum, Otterlo, Holanda
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Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
14 comentarios:
A flowered field is perfect to wish you a wonderful weekend, Elvira. I hope you're fine. Un fuerte abrazo.
The same to you, dear Maria Grazia!! I hope you don't have many tests to mark.
Un fuerte abrazo
resulta que heredamos de Van Gogh nuestro gusto por los troncos¡¡¡
^__^
qué divino¡¡¡ cómo resaltan las flores como botones espigados... y el azul por todas partes¡¡¡
saludos
Va a ser eso, Pilar, jaja! Este cuadro no lo recordaba, lo había guardado un buen día y luego lo olvidé. Al verlo hoy, he recordado las fotos de troncos que puse el otro día.
Es divino, me chifla. Saludos
¡¡Qué bonito!! No lo conocía, pero casi mejor así porque me he llevado una estupenda sorpresa al abrir el blog.
Para mí ha sido un descubrimiento muy reciente. Da gusto descubrir cosas así. :-)
Buenas tardes, es la primera vez que entro.
Me gusta Van Gogh, transmite pasión, aún en el mas sencillo de sus cuadros.
Buena tarde
El tronco parece doble, es muy especial. Tus últimas entradas tienen unas fotos estupendas: la salvia rosa, las aulagas... con el frío que hace ya hoy por aquí, la primavera parece cosa de otro mundo. Un beso
Buenas tardes, Pluvisca, bienvenida! Es cierto, ese tronco, por ejemplo, tiene mucha fuerza.
Saludos
Hola, Aleste: sí, es un árbol con tronco doble, precioso.
No creas que por aquí hay muchas flores, no. Son muy pocas, pero a la que veo una, me lanzo, jaja! Me alegra que te gusten las fotos.
Un beso
¡A estos también me dan ganas de abrazarlos!
Cómo me gusta Van Gogh. ¿Te he comentado ya que lo aborrecía hasta que fui al D´Orsay? Allí comprobé que del amor al odio hay un pasito muy, muy pequeño.
No, no me lo habías dicho. Lo mío fue "amor a primera vista". :-)
Qué "bruto", hay que ver cómo son esas rugosidades en el árbol. LA REPERA, VAMOS!
Lo de la genialidad de este hombre es algo que me deja en el sitio cada vez que veo sus cuadros. Qué tristeza tan grande que no pudiera constatar que EL tenía razón y se iba a convertir en el pintor -posiblemente- más conocido y reconocido, verdad?
Es totalmente genial. Y una pena que no conociera su éxito, seguro que una gran parte de su desesperación se le habría pasado.
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