martes, 25 de agosto de 2009

Robert Doisneau: Una mirada oblicua


Una mirada oblicua (1948), fotografía de Robert Doisneau.

9 comentarios:

Cristina dijo...

No conocía esta foto, pero me ha parecido divertidísima (¿crees que es espontánea de verdad?).

Como ya estoy en casa entre esta tarde y mañana te mandaré la imagen escaneada del cuadro de Matisse. Lo prometido es deuda.

Elvira dijo...

Sí, es muy divertida. Pues yo me pregunto lo mismo que tú. ¿Estaría "en guardia" dentro de la tienda esperando la imagen, o la preparó?

Ah, ¡qué bien! Sin ninguna prisa. Muchas gracias por acordarte.

Pilar en Córdoba dijo...

yo sí conocía la foto y espontánea o no... ¡¡¡sí que es buenísima¡¡¡¡

es una mirada oblícua o dos miradas divergentes... el caso es que a veces mirando, a veces pensando, uno está en Madrid y otro en China... jaja

lo de la mirada oblicua debe ser porque la de la señora es la recta y la del señor la que se sale, la que se tuerce... en todos los sentidos¡¡¡

¡¡¡un poema la cara del señor...jaja¡¡

Besos :)

Elvira dijo...

Debe ser. Desde luego si estaba preparado el señor pone la cara perfecta, es un grandísimo actor, jajaja!

Besos

Pilar en Córdoba dijo...

me acabo de dar cuenta de que pudiera ser una cámara oculta, puede que Doisneau tenga varias de otras tantas parejas... porque no sabemos lo que atrae la atención de la señora, pero la que observa el caballero es demasiado tentadora para obviarla... ¿no os parece?

Montse dijo...

Muy divertida esta foto, cada uno mira lo que le gusta y por lo que parece esta pareja no comparte gustos,jeje..
A saber lo que mira la señora, pero a él se le ha puesto una cara de bobo mirando el cuadrito.

Elvira dijo...

Sí, Pilar comprendo que se le vayan los ojos. Y podría ser una cámara oculta, desde luego.

Elvira dijo...

Hola Montse: no creo que a la señora le emocione tanto este cuadro como a él. :-)

Elvira dijo...

Sí que había un objetivo indiscreto o algo así, porque he encontrado más fotos sobre el mismo tema. Las caras de todos los transeúntes que se paran a mirar no tienen desperdicio.