miércoles, 12 de agosto de 2009

Narciso y Eco

Eco y Narciso (1903), de John William Waterhouse, Walker Art Gallery, Liverpool.

A continuación un extracto de un texto que habla del narcisismo positivo y negativo, relacionándolo con el mito. Aclaración: se llama narcisismo positivo al sentimiento de la persona que cree ser superior a los demás, única, especial, y está centrada en sí misma, y narcisismo negativo al que se considera especial en que es un desastre, no merece nada bueno, etc. y que debido a esa autovaloración tan negativa suele entrar en relaciones degradantes.

"¿Qué clase de persona es capaz de tolerar una relación tan frustrante y destructiva? Alguien que, como Narciso y Eco, entre en la relación ya “tocado”. Sólo a alguien totalmente centrado en sí mismo, a un narcisista (ya sea con el disfraz de grandiosidad, como personifica Narciso, o con el del autodesprecio, como personifica Eco) le parecería familiar y cómoda esta clase de interacción unilateral... Cuando un narcisista que se autosacrifica se enamora de un narcisista que se autoengrandece, sus neurosis se engranan perfectamente y ambos terminan por sentirse infelices... Esta clase de emparejamientos amorosos narcisistas se hallan condenados al fracaso porque ninguno de los dos es capaz de conocer o amar al otro. Eco, sin un verdadero yo, representa a la narcisista que se autosacrifica, demasiado dañada como para desear o esperar nada para sí misma. Narciso, obsesionado con su propia imagen, representa al narcisista que se autoengrandece, que sólo piensa en sus propias necesidades." Jane G. Goldberg, El Lado Oscuro del Amor, Ed. Obelisco 1995.

15 comentarios:

leo dijo...

Y todos obedecemos, en mayor o menor medida, a uno u otro, ¿no?
Me ha gustado mucho encontrarme este tema, Elvira. Lo tenía en mente desde hace tiempo, solo que con palabras más imprecisas. ¿Casualidad? (¿Tú crees que la casualidad existe?)

Elvira dijo...

Estaría flotando el tema en el aire y zas!! Lo cacé y lo puse. :-)

Pues sí, yo creo que todos tendemos un poco a uno u otro patrón. En el lado del narcisismo negativo hay personas con un grado de automachaque considerable, pero también es autocentramiento al fin y al cabo. En plan: soy terrible, lo que me pasa es horroroso, etc. Pero al fin y al cabo sigue siendo un yo, yo, yo obsesivo.

Besos

Elvira dijo...

Me olvidaba: respecto a la casualidad, creo que hay cosas que nos parecen casuales y que no lo son, pero debe existir un cierto grado de casualidad, ¿no? Aunque sólo sea por cálculo de probabilidades...

Femmedchocolat dijo...

caray, qué excelente entrada!

Nunca había oído lo del narcisismo negativo. Le da una excelente visión del tema de Eco y Narciso enfocada así . La verdad que me ha sorprendido .

Qué maravilla ver a Waterhouse en tu casa, sonmágicos sus cuadros. Le adoro.

Me ha pasado algo muy parecido que a leo ... Debía ser que flotaba en las ondas ... o algo así.
^_^
Bueno, sea como sea , ha sido estupendo eso de que pescaras la onda .

No, las relaciones nunca pueden ser desiguales o unilaterales, como bien dices.

un besote gordo!!!!!!!!!!!!!!!

Elvira dijo...

¡Que bien que te haya gustado! Otro besote gordo

Sra de Zafón dijo...

Ya se sabe que el narcisismo es algo que incapacita para cualquier relación sana, pero normalmente se habla del narcisista positivo, y muy pocas del negativo, dos caras de la misma moneda. La primera cara es terrible, conozco personas que han destrozado literalmente a otras. Casos de padres e hijos y también casos de parejas. Pero a mí personalmente me irrita mucho más la otra cara de la moneda (supongo que por haber padecido a una persona así) ya que estas personas siempre se ocultan tras máscaras que no parecen peligrosas para quienes les rodean: debilidad, fragilidad, poca autoestima. Pero esas máscaras esconden terribles artes de manipulación, intentos de culpabilizar e incluso cuadros psicóticos.
Todo lo que ocurre en el mundo es para fastidiarles, todo el mundo les falla, les miente, o estafa, la mayoría no paran de repetir lo poquita cosa que son y de ver enemigos en todas partes. Sus "delirios" son la única realidad, con lo que la interacción con el resto del mundo es casi nula, pero esto no significa que no se relacionen, lo hacen, pero manipulando e intentando culpabilizar a los demás de todas sus "desgracias" (errores)
Tremendo Elvira...
Besos con sombra.

Elvira dijo...

Te diré que a mí me fastidian casi por igual los dos extremos. Creo que hay otro perfil que no es narcisismo negativo, y que puede ser presa fácil de un narcisista de cualquiera de los dos tipos: la persona que se ha creído los mensajes negativos que le han dicho sobre ella misma, y hasta que no abre bien los ojos, encuentra casi natural que la traten mal. La diferencia es que ella sale por piernas en cuanto se da cuenta, en cambio la persona a la que le gusta ir de víctima sigue en su rol. O sea, que hay víctimas reales y los que van de víctima porque le sacan partido a su rol a base de manipular. Buf, sí que es duro todo esto.

Besos

El Doctor dijo...

Consigues sintetizar magníficamente este mito tan contemporáneo.A medida que pasa el tiempo la humanidad se va empobreciendo,el ser es más anónimo y sus motivaciones más irreales.Estoy algo cansado de encontrarme en el trabajo,en la familia,en la calle,etc.,a gentes narcisistas,ególatras,dialoguístas de sí mismos,monologuistas incansables.Sólo se escuchan así mismos para comprobar más tarde que no les ha servido absolutamente de nada.No se si te has dado cuenta,mi querida Elvira,que estás hablando con alguien y notas que no te están escuchando porque observas que ya tienen la boca llena de palabras esperando en momento de tu silencio para arrojarlas sobre tu cara como si de una manguera de agua se tratara.
Muy interesante este tema.

Besos y un fuerte abrazo.

Elvira dijo...

Totalmente de acuerdo, parece que en vez de diálogo sea un turno alternativo de monólogos, y aunque tu intervención sí pretenda ser diálogo, si no te escuchan, acaba siendo eso. Como una manguera de agua, jaja! Sí, algo así.

El narcisismo extremo es aburridísimo, aunque todos tengamos un cierto grado de narcisismo. Creo que hay que huir de esas situaciones, no alimentar esos egos insaciables, que mientras más comen, más alimento buscan.

Besos y un fuerte abrazo

El Doctor dijo...

La conversación es un arte perdido.La degradación del lenguaje es una de las mayores lacras de nuestra sociedad.Es penoso como pueden hablar tanto con un lenguaje tan reducido,tan estándar.Muchas veces me sorprendo cuando alguien está hablando sobre sus motivaciones interiores,y, a falta de lenguaje,se interrumpe y dice:"Tú me entiendes." Y yo siempre suelo decir:"No".En un mundo del culto al cuerpo,a la salud,nos encontramos también en un mundo de inválidos del habla.
Pero hay que ver,mi querida amiga,que con un lenguaje tan reducido,te ponen contra la pared durante unas horas insufribles.

Elvira dijo...

Es cierto. Y me he fijado particularmente en la falta de adjetivos: con decir "cojonudo", "acojonante", "de coña", "una putada", "de puta madre", ya está. Si dices que algo es maravilloso, casi pareces cursi. Y si utilizas mucho vocabulario, no te entienden bien, te miran como si fueras resabiada.

Pero siempre quedará gente como tú a la que le guste conversar, espero. :-)

El Doctor dijo...

Desde luego.En estas cosas me considero un hombre de otra época.Me gusta "conversar"y sobre todo escuchar hablar a personas inteligentes para aprender.Las tertulias han desaparecido como los cafés.Ahora existen simples bares ensordecedores con pantallas de televisión y gentes que gritan.¿Por qué la gente grita tanto? Sí,me encanta conversar,pero,ay,cada vez quedan menos personas para ello.
Gracias por hacer posible esta relación blogera,tan,tan interesante e imprescindible para mí.

Besos y un fuertísimo abrazo.Que tengas un buen domingo Elvira.

Elvira dijo...

Odio los bares ensordecedores, igual que tú. Y las tertulias sí parecen haber desaparecido, una lástima.

Muchísimas gracias, querido Francisco, y te devuelvo totalmente el cumplido, de verdad.

¡Buen domingo! Besos y otro fortísimo abrazo para ti

Io dijo...

Estoy totalmente de acuerdo con todo lo que apunta Francisco Machuca. Echo de menos las sanas tertulias, los cambios de impresiones, los "intercambios" en grupo de vida y pensamiento que tenía cuando era joven, sentados en el suelo sobre almohadones, o alrededor de una mesa con tazas de té y café.

Conozco a aquél que tiene la boca llena de palabras esperando a que termines para soltar toda su verborrea, tan pendiente de lo que quiere decir que ni siquiera te ha escuchado porque sólo se escucha a sí mismo, y además suele elevar la voz de modo insufrible para asegurarse de que todos escuchan sus magistrales peroratas.

Y también he conocido a Narciso y a Eco, y no sé cuál de los dos es más cargante.

Besos a los dos.

Elvira dijo...

Yo me pido el sofá en vez de sentarme en el suelo, jaja! Bromas aparte, totalmente de acuerdo. Me encantan las tertulias en las que se aprende y se disfruta tanto. A falta de tertulias "de carne y hueso", me encantan las tertulias blogueras.

Besos, contertuliana!