Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
Mira qué interesante, Montse: "A su vuelta a Barcelona conoce a Júlia Peraire, bella vendedora callejera de lotería de la que se encaprichó febrilmente. La convirtió en su amante y su modelo, y aunque les diferenciaban 22 años de edad, siguieron juntos toda la vida. La sargentain -12- es uno de los primeros retratos que Casas le dedicara, demostrando una fascinación renovada por la belleza del retrato y exhibiendo un erotismo sereno que impregnó esa parte de la obra y de la vida del artista. La entrada en sociedad de la joven vendedora repercutió en la temática de sus retratos: imágenes de burguesa altiva, con ropajes dignos de la irrupción en su nueva clase, confirmando su derecho a pasearse por los salones que hasta enconces le estaban vedados. Se casó con ella en 1922, cuando logró vencer la oposición familiar."
De corazón: se te agradece el detalle. Y que hayas seleccionado esa obra concreta multiplica los agradecimientos. Leía ayer (casualidades) que Ramón Casas, en 1886, con veinte años, pintó una obra de tema taurino "Toros" (Estesa de cavalls), que compró en 1900 un millonario norteamericano. La obra se subastó por Christie´s en 2007 y ahora ha sido adquirida por el MNAC por 410.000 euros. La pequeña anécdota final es que el precio de adquisición triplica el presupuesto anual del Museo para adquisiciones.
Caramba, eso de que el precio triplica el presupuesto anual para adquisiciones me deja pasmada.
Acabo de buscar ese cuadro, y aunque es bonito, me da mucha pena el caballo herido en el suelo. Mi padre me llevó a los toros una vez y no quise volver más. Y eso que me encantan las fotos que él hacía del toreo.
Qué bonito este dibujo, la mirada...
ResponderEliminarDesde luego que el que sabe sabe ¡menudo retrato!
ResponderEliminarBesos
Hola Meme y Chusa: es elegantísimo, ¿verdad? Una belleza.
ResponderEliminarBesos
¡Y como si fuera lo más sencillo del mundo!
ResponderEliminar¡Qué difícil hacer las cosas tan bien! Mucho talento y mucho oficio.
ResponderEliminarElvira que me temo lo peor, este dibujo de Casas solo son maniobras de distraccion mientras preparas tu mortifera proxima adivinanza. Ja, ja, ja, ja.
ResponderEliminarPrefiero a Santiago Rusiñol, amigo de Casas. Aunque este dibujo es magnifico.
Que los Reyes te traigan muchas cositas.
Mi mortífera próxima adivinanza, jajaja! Ya tengo algo por ahí, pero no sé si me convence.
ResponderEliminarMe parece que este año no me van a traer nada, espero que a ti sí.
Muy elegante la dama y el dibujo plasma esa elegancia hasta en la mirada ¡fantástico!
ResponderEliminarElvira, los Reyes te traerán mucha felicidad si te portas bien con las "adivinanzas" que nos pones, sino te traerán carbón,jejeje...
Mira qué interesante, Montse: "A su vuelta a Barcelona conoce a Júlia Peraire, bella vendedora callejera de lotería de la que se encaprichó febrilmente. La convirtió en su amante y su modelo, y aunque les diferenciaban 22 años de edad, siguieron juntos toda la vida. La sargentain -12- es uno de los primeros retratos que Casas le dedicara, demostrando una fascinación renovada por la belleza del retrato y exhibiendo un erotismo sereno que impregnó esa parte de la obra y de la vida del artista. La entrada en sociedad de la joven vendedora repercutió en la temática de sus retratos: imágenes de burguesa altiva, con ropajes dignos de la irrupción en su nueva clase, confirmando su derecho a pasearse por los salones que hasta enconces le estaban vedados. Se casó con ella en 1922, cuando logró vencer la oposición familiar."
ResponderEliminarhttp://arteninona.wordpress.com/2008/03/02/ramon-casas-i-carbo/
En vista de lo que me dices, la próxima adivinanza será más fácil (espero). Besos
Elvira,
ResponderEliminarJustamente iba a preguntarte quién era Julia cuando acabo de leer tu comentario. Elegante, elegantísima. Una señora en toda regla.
Un saludo
Sí, tiene mucho estilo y elegancia.
ResponderEliminarUn saludo (¿ya has preparado todo???)
De corazón: se te agradece el detalle. Y que hayas seleccionado esa obra concreta multiplica los agradecimientos.
ResponderEliminarLeía ayer (casualidades) que Ramón Casas, en 1886, con veinte años, pintó una obra de tema taurino "Toros" (Estesa de cavalls), que compró en 1900 un millonario norteamericano. La obra se subastó por Christie´s en 2007 y ahora ha sido adquirida por el MNAC por 410.000 euros. La pequeña anécdota final es que el precio de adquisición triplica el presupuesto anual del Museo para adquisiciones.
Me alegra que te haya gustado, Jesús.
ResponderEliminarCaramba, eso de que el precio triplica el presupuesto anual para adquisiciones me deja pasmada.
Acabo de buscar ese cuadro, y aunque es bonito, me da mucha pena el caballo herido en el suelo. Mi padre me llevó a los toros una vez y no quise volver más. Y eso que me encantan las fotos que él hacía del toreo.
¡Qué bonita historia has contado!, se parece algo al efecto Pigmalión de B.Shaw ¿no crees?.
ResponderEliminarBesos.
Sí, pero con final feliz, porque el profesor Higgins no acabó cediendo a los encantos de Eliza.
ResponderEliminarBesos
¿Ah, no? Yo creía que sí.
ResponderEliminarQuizás en la película My Fair Lady sí, pero en la obra de Bernard Shaw no. Bueno, luego lo comprobaré, pero juraría que no.
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