Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
jueves, 23 de julio de 2009
Hiroshige: Monte Fuji
Vista del Monte Fuji desde Satta en la bahía de Suruga, con una ola gigante (1858),
Estoy con lo que dice ana, es una delicadeza. Ahí, con el ruido del agua, me dormiría una buénisima siesta, me caigo de sueños. Buenos días y besos a todas
¡Qué bien arrulla el ruido del mar! Muchos grabados japoneses me parecen delicados y elegantes, con una composición muy bien estudiada y equilibrada. Éste, en concreto, también me transmite mucha fuerza, y el de La gran ola de Hokusai no digamos. Dejo enlace abajo. Besos
Algo tiene en la mirada los japoneses que perciben, expresan y nos comunican, en medio de cualquier circunstancia, incluso una gran ola, la delicadeza y la calma como nadie. Ay, no sabes que bien me vienen estas dosis de delicada belleza calmada :-)
Me alegro, Chusa. Tengo la sensación de ser buscadora de "pepitas de oro". :-) Cada vez que encuentro una, intento traerla al blog. Algunas ya las encontré hace tiempo y están en diferentes carpetas en las que voy rebuscando.
Vista del Monte Fuji desde Satta en la bahía de Suruga, con una ola gigante (1858),
Preciosidad. Delicadeza...
ResponderEliminarPrecioso este grabado con el mar embravecido y la espuma de las olas. Y, aún así, transmite calma, supongo que a través del Fuji al fondo.
ResponderEliminarBesos.
Hola Ana: sí, las dos cosas.
ResponderEliminarHola Montse: A mí me transmite vida, pero es cierto que el Fuji al fondo es como un anclaje.
Besos a las dos
Estoy con lo que dice ana, es una delicadeza.
ResponderEliminarAhí, con el ruido del agua, me dormiría una buénisima siesta, me caigo de sueños.
Buenos días y besos a todas
¡Qué bien arrulla el ruido del mar! Muchos grabados japoneses me parecen delicados y elegantes, con una composición muy bien estudiada y equilibrada. Éste, en concreto, también me transmite mucha fuerza, y el de La gran ola de Hokusai no digamos. Dejo enlace abajo. Besos
ResponderEliminarLa gran ola
Algo tiene en la mirada los japoneses que perciben, expresan y nos comunican, en medio de cualquier circunstancia, incluso una gran ola, la delicadeza y la calma como nadie.
ResponderEliminarAy, no sabes que bien me vienen estas dosis de delicada belleza calmada :-)
Más besos.
ya sabes.....qué no te habré dicho ya..que me encantan..además ese cuadro ya lo he visto antes..pero no me acuerdo donde.
ResponderEliminarBesicos
Me alegro, Chusa. Tengo la sensación de ser buscadora de "pepitas de oro". :-) Cada vez que encuentro una, intento traerla al blog. Algunas ya las encontré hace tiempo y están en diferentes carpetas en las que voy rebuscando.
ResponderEliminarMás besos
A mí me pasa eso muchas veces, Pili.
ResponderEliminarMás besos