Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
martes, 16 de junio de 2009
Carl Larsson: Deberes de vacaciones
Carl Larsson: Deberes de vacaciones (c. 1900). Ateneum Art Museum, Helsinki.
Me gustaría mirar por esa ventana y ver el jardín que él está viendo...
Además de imaginarme el jardín y simplemente mirar por esa ventana y no pensar en nada, me gusta la luz en el suelo, en el cuarto. Los mundos dentro y fuera se mezclan, fluyen, confluyen, son fluidos como el mar en el "poema" que escribí esta mañana de una sola vez, sin pensar, o mejor dicho pensando en voz alta.
Acabo de leerlo. Cuando uno domina mucho una lengua hay demasiado control de todos los matices a veces, y entonces no aflora lo profundo que quiere aparecer sin ser llamado. Mejor dejar que salga fluido, como tú dices. Keep writing!
"Prefiero dejarme arrastrar por vagos sentimientos que flotan en el mar."
Es esta mañana de sonidos no desvelados todavía y todas las mañanas que nacen y mueren que nacen y mueren ahora dentro de mi estómago siguiendo el compás que han inventado mis dedos así tiritando así dedos de niña improvisándome sobre la piel nublados pentagramas y más de cinco líneas para escribir que es esta mañana ya es esta mañana y todas las mañanas ahora las que hacen que vibre en mi caja de resonancia.
La autora es bloguera: http://lalunaesdepapel.blogspot.com/
Se escapa de los deberes mirando por la ventana, jaja! ¡Cómo le entiendo! Cuando tenía exámenes que corregir, se me ocurría hacer de todo antes que ponerme...
Sí, un pequeño Leopardi. Quizás le inspire más lo que ve por la ventana que el sufrimiento por los deberes, ¿no crees? Quizás no es un sufrimiento lo suficientemente "romántico" como para escribir un poema.
En esa posición, estuve muchas veces en casa de mi abuela mirando hacía el jardín. Ni estudiaba, ni pensaba. Sólo escuchaba su voz, pues cantaba muy bien.
Para ser completa en mi memoria, le falta, el vaso de leche fresca y la rebanada de pan con nata y un poquito de miel por encima que ella me preparaba con much´simo cariño.
¡Qué magnífico instante! Creo que todos hemos estado así en algún momento, intentando pensar y al mismo tiempo divagando en nuestros propios sueños con la mirada absorta. Bien ha dicho Giovanni, que la luz viene de fuera del mundo que uno sueña y la sala tiene otro colorido más cálido, más real. Un abrazo.
Pero sin deberes... O sólo los que te gustan hacer (cumplir).
ResponderEliminar¡Eso!
ResponderEliminarAdemás de imaginarme el jardín y simplemente mirar por esa ventana y no pensar en nada, me gusta la luz en el suelo, en el cuarto. Los mundos dentro y fuera se mezclan, fluyen, confluyen, son fluidos como el mar en el "poema" que escribí esta mañana de una sola vez, sin pensar, o mejor dicho pensando en voz alta.
ResponderEliminarAcabo de leerlo. Cuando uno domina mucho una lengua hay demasiado control de todos los matices a veces, y entonces no aflora lo profundo que quiere aparecer sin ser llamado. Mejor dejar que salga fluido, como tú dices. Keep writing!
ResponderEliminar"Prefiero dejarme arrastrar
por vagos sentimientos
que flotan en el mar."
No puedo evitarlo (jaja), el writing. Y parece tú tampoco...
ResponderEliminarMe encanta un poema que leí ayer:
ResponderEliminarEs esta mañana
de sonidos no desvelados
todavía
y todas las mañanas
que nacen y mueren
que nacen y mueren
ahora
dentro de mi estómago
siguiendo el compás
que han inventado
mis dedos
así
tiritando
así
dedos de niña
improvisándome
sobre la piel
nublados pentagramas
y más de cinco líneas
para escribir que
es esta mañana
ya es esta mañana
y todas las mañanas
ahora
las que hacen que vibre
en mi caja de resonancia.
La autora es bloguera: http://lalunaesdepapel.blogspot.com/
No, yo tampoco, pero no tengo la vena artística normalmente. Me gusta expresarme, que no es poco.
ResponderEliminarGracias por traer el poema de tu amiga bloguera, me ha gustado.
Los deberes de vacaciones eran lo peor, pero creo que en ese ambiente no debían de serlo tanto.
ResponderEliminar... Quizá sí, vista la expresión del pobre niño ;)
Se escapa de los deberes mirando por la ventana, jaja! ¡Cómo le entiendo! Cuando tenía exámenes que corregir, se me ocurría hacer de todo antes que ponerme...
ResponderEliminarPobrecito! Pero podria empezar a escribir un poema y llegar a ser famoso... un pequeno Leopardi... el sufrimiento podrià inspirarle algo ...
ResponderEliminarSí, un pequeño Leopardi. Quizás le inspire más lo que ve por la ventana que el sufrimiento por los deberes, ¿no crees? Quizás no es un sufrimiento lo suficientemente "romántico" como para escribir un poema.
ResponderEliminar¡Y a mí!
ResponderEliminarMe lleva directa a la infancia...
Buenos recuerdos, Leo...
ResponderEliminarEn esa posición, estuve muchas veces en casa de mi abuela mirando hacía el jardín. Ni estudiaba, ni pensaba. Sólo escuchaba su voz, pues cantaba muy bien.
ResponderEliminarPara ser completa en mi memoria, le falta, el vaso de leche fresca y la rebanada de pan con nata y un poquito de miel por encima que ella me preparaba con much´simo cariño.
Un beso y gracias por traerme el recuerdo.
¡Qué lindo recuerdo, Luna! Gracias por traerlo aquí. Un beso
ResponderEliminar¡Qué magnífico instante!
ResponderEliminarCreo que todos hemos estado así en algún momento, intentando pensar y al mismo tiempo divagando en nuestros propios sueños con la mirada absorta.
Bien ha dicho Giovanni, que la luz viene de fuera del mundo que uno sueña y la sala tiene otro colorido más cálido, más real.
Un abrazo.
Sí, esa mirada absorta (me gusta esta palabra, es muy expresiva). Un abrazo
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