Las cuatro estaciones (1907-1908). Vidrieras pintadas al estilo de Alphonse Mucha, realizadas por un artista sin identificar, posiblemente el propio Mucha o bajo la supervisión de Mucha, en Chicago. Smith Museum of Stained Glass Windows, Chicago. (From the museum placard: "After Alphonse Mucha by an unidentified artist and fabricator, possibly Mucha himself or under Mucha's supervision, in Chicago. Made for a house at 6502 North Sheridan Road.")
Buenos días Elvira
ResponderEliminarA mi me da que no son de Mucha, los rasgos de los rostros no me resultan tan hermosos como los suyos. Pero sobre todo me ocurre que no me emocionan aún viéndolos bonitos.
Cuanto se aprende contigo, no sabía que existían.
Besos, (ya casi estoy de vuelta :-)
Hola Chusa: es posible que Mucha diera permiso para que se hicieran, o algo así. A mí la primavera me gusta menos, pero el verano y el invierno me gustan bastante.
ResponderEliminarBesos casi de bienvenida
Hola Elvira,
ResponderEliminarque maravilla de entrada e ilustraciones¡!¡ Tienen gran semblanza con las de Mucha, aunque él plasmaba en los rostros un toque de madurez y realismo mayor ¿no te parece?
Gracias por tanto disfrute.
Besos estacionales****
Hola Ofelia: sí, las caras de los cuadros de Mucha tienen más fuerza, creo.
ResponderEliminarGracias a ti por traernos la genciana de las montañas al llano.
Y besos***
Me encanta visitar tu Blog y aprender de todo.
ResponderEliminarHermosas las estaciones, recuerdo que mi mamá tenía unas japonesas de cada estación.
Un abrazote y un beso desde mi rincón.
No conozco tanto para valorar, pero encuentro que son bonitas y que la vista disfruta. Siendo vidrieras es más difícil la expresividad, que en la pintura. Se suelen ver de lejos y en altura.
ResponderEliminarPero soy bastante ignorante en este tema ehhh.
Un abrazo
¡Gracias, Gabiota! Eres muy amable. No me imagino a la japonesa representando al verano, con tantos ropajes como llevan (me refiero al vestido tradicional, claro).
ResponderEliminarHola Laura: pues a lo mejor es más difícil pintar sobre cristal, no tengo ni idea.
Un abrazo a las dos
Las cuatro son preciosas, verlas con la luz reflejada en las cristaleras debe de ser espectacular.
ResponderEliminarOpino como Laura, trabajar el vidrio no es lo mismo que pintar e incluso el tamaño, imagino que mayor, distorsiona el original. Lo digo por pura lógica, que yo tampoco entiendo.
Un besi!!
opino lo mismo que la chicas...las caras tienen menos fuerza...pero igualmente son deliciosas.
ResponderEliminarbeso*
Hola Montse: seguramente tienes razón y son de un tamaño bastante grande. Es verdad, debe ser muy bonito ver pasar la luz por estas vidrieras.
ResponderEliminarHola Rayuela: pues me alegra que os gusten, aunque no sean originales de Mucha (que no es seguro).
Besos a las dos**
Estupendos los detalles que nos ofreces de las cabezas. Me quedo con la veraniega... me ha gustado mucho esa mirada de desdén.
ResponderEliminarEs la que tiene más atractivo, sí.
ResponderEliminar¡Buenas noches, Marcos!
Hola Elvira, así de pronto sino avisas no me había dado cuenta, mirando más puede ser, yo me conformo con toda esa belleza sin afinar tanto, ya querría yo ver esas vidrieras sean de quien sean.¡ Preciosas!
ResponderEliminarBesicos,ninfa del jardín botánico.
Hola Rosa: lo importante es si nos gustan o no, ¿verdad?
ResponderEliminarConfiaba en que tú supieras qué flor era la rosa a la que le levanté las faldas. Por cierto, aquella flor roja que no conocíamos, al final me la identificaron, o sea que la entrada ya tiene nombre. :-)
Besicos, ninfa del Ebro
Ya lasconocía. Me encantan.
ResponderEliminarHola Mar: yo las descubrí el año pasado.
ResponderEliminarEl Art Nouveau en todo su esplendor.
ResponderEliminarDebe ser bonito ver las vidrieras con la luz atravesándolas y realzando la pintura.
ResponderEliminarson preciosas, me encanta el estilo un tanto renacentista. Me han inspirado mucho :)
ResponderEliminarun saludo
Veronica.
Hola Verónica: bienvenida al blog, y me alegra que te inspiren estas obras. Saludos
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