Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
Que bonita es!!! Las flores son preciosas! Es muy curioso sentir el "rechazo" de sus hojasm parece que quieran esconderse en cuanto las tocas. A mi me recuerdan a los niños cuando alguna persona, sólo por ser niños, decide acariciarles sin pedir permiso. Ese modo de encoger hombros y cabeza esquivando el contacto...
Es verdad, Chusa, es un buen símil. A mí me gusta acercarme poco a poco a los niños, y sólo darles un beso si veo que les va bien. No sé por qué se cree que un niño es "tierra de todos".
Qué linda; aquí la venden mucho en el vivero, en macetita. Tuve la oportunidad en el vivero ( hace muchos años) de ver las primeras que trajeron aquí, para ver si se aclimataban a una zona con tanto viento. El hombre me explicó que ellos se encargaban ( para el Ayuntamiento) de hacer la probatina a ver qué pasaba. Ahora, cada vez que paseo por Fernando El Católico ( una de las calles principales de aquí) me acuerdo de aquello cuando veo- en una zona bastante ventosa por cierto- aquellas mimosas convertidas en árboles púrpura. Es una experiencia curiosa esa de verlas plegarse y expandirse a medida que les sopla el viento...
Bueno pos ya está la batallita de hoy, jajajajja
Parezco a la abuela cebolleta, ajjajajjajajajajajaja
Que bonita es!!! Las flores son preciosas! Es muy curioso sentir el "rechazo" de sus hojasm parece que quieran esconderse en cuanto las tocas. A mi me recuerdan a los niños cuando alguna persona, sólo por ser niños, decide acariciarles sin pedir permiso. Ese modo de encoger hombros y cabeza esquivando el contacto...
ResponderEliminarBesos, Elvir<3 :-)
¡Qué curioso! Me he quedado sorprendidísima con lo de las hojas.
ResponderEliminarEs verdad, Chusa, es un buen símil. A mí me gusta acercarme poco a poco a los niños, y sólo darles un beso si veo que les va bien. No sé por qué se cree que un niño es "tierra de todos".
ResponderEliminarBesos, vaquiña!
Es curiosísimo, Cristina. Parece una reacción animal, más que vegetal.
ResponderEliminarQué curioso, me gustaría probar a tocar alguna. Debe de dar mucha sensación de estar viva, por el movimiento.
ResponderEliminarHermosa flor...buena fotografía como siempre!
ResponderEliminar-Yo la vi en un vivero, Marcos, y la toqué, por supuesto. Tenía un enorme letrero que ponía: Touch me!
ResponderEliminar-¡Gracias, Tuqui!
Qué linda; aquí la venden mucho en el vivero, en macetita.
ResponderEliminarTuve la oportunidad en el vivero ( hace muchos años) de ver las primeras que trajeron aquí, para ver si se aclimataban a una zona con tanto viento. El hombre me explicó que ellos se encargaban ( para el Ayuntamiento) de hacer la probatina a ver qué pasaba. Ahora, cada vez que paseo por Fernando El Católico ( una de las calles principales de aquí) me acuerdo de aquello cuando veo- en una zona bastante ventosa por cierto- aquellas mimosas convertidas en árboles púrpura.
Es una experiencia curiosa esa de verlas plegarse y expandirse a medida que les sopla el viento...
Bueno pos ya está la batallita de hoy, jajajajja
Parezco a la abuela cebolleta, ajjajajjajajajajajaja
^____^ besos cebolletos
¡Qué bonita fotografía! y la mimosa, qué tímida, jeje...
ResponderEliminarCurioso lo que ha contado Femme, me encanta saber esas cosas y con la gracia que lo explica.
Un beso.
Me gusta tu historia, Femme! Así que soportan bien el viento... eso es que son fuertes.
ResponderEliminarHola Montse: no le gusta que la toquen, es muy recatada. :-)
Besos a las dos!!
O sea, que mimosa y púdica. Contigo, Elvira, no se asustó: siguió siendo mimosa y púdica.
ResponderEliminarBueno, una hoja se replegó, eso sí. :-)
ResponderEliminarTengo una en casa que acaba de florecer, es preciosamente mimosa y retrae sus hojas si la toco.
ResponderEliminarYo solo la he visto en maceta, en un vivero. Saludos!
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