Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
Hola Anónimo: Como prototipo de belleza masculina, le prefiero a él antes que a Clark Gable, aunque como actor creo que hay varios mejores. Me gustaba más un poco mayor que demasiado joven, aunque en esta foto está genial.
Ahora, en los tiempos que nos ocupan, ningún pavo se pone el cigarrillo en los labios como Cooper, nadie monta a caballo como Wayne, ni anda como Mitchum, ni mira a una chica como Gable, ni se viste una gabardina y un sombrero como Bogart, ni seduzze a una prinzzesa como Peck o besa a una bruja rubia de zzapatos rojos como James Stewart.
En aquella época las estrellas que brillaban en el Olimpo de los Dioses eran doradas y el aire olía, siempre, a madreselva.
Besos, Elvira
Caperuzzita Fumándose un Zzigarrillo como Cooper.
Possdata: Nunca más nadie llevo un traje como Holden ni caminó hazzia la muerte, con las botas puestas, como él
(es que se me había olvidado Holden, por eso lo pongo en la Possdata)
guapísimo, Elvira¡¡¡ me quedo con el comentario de Caperuzzita... también tengo la sensación de que en aquella época había estrellas, que brillaban rutilantes¡¡¡ ocupando toda la pantalla y traspasándola¡¡¡ ¿por qué ahora no me parece igual? besos para los tres ¡¡¡
¡Uf, qué hombre!!! Yo también prefiero a Cooper antes que al Gable, que tenía unas orejas de suplillo horribles!! Gary Cooper es guapo, elegante y todo un caballero ¡vamos, el hombre que todas querríamos!!
Supongo que el glamour del Hollywood de aquellos años, tanto de ellos como de ellas, se debe al atractivo de las escenas y a que las historias que contaban giraban en torno a vidas o acomodadas o de héroes y heroínas, vidas intensas y apasionadas, tan distintas a lo cotidiano del mundo que nos rodea.
PD: Yo también me traigo las gafas para cuando vengan las demás, que me huelo que van a ser de infarto!
Parece la foto de un anuncio de moda.
ResponderEliminarSí, es verdad. Era muy elegante y estiloso... además de guapo.
ResponderEliminarEn esa foto no parece él, está raro, ¿no?
ResponderEliminarA mí también me parece que era un tío elegante.
:-)
Ah, pues yo no le veo raro. :-)
ResponderEliminarPor Dios, Elvira, esto es para no dejar de mirar tu blog en todo el dia.
ResponderEliminarBesos
Guapo, ¿eh? Jajaja!
ResponderEliminarBesos
Bonita foto. Junto con Clark Gable mi actor favorito. Aqui está muy joven, pero desde luego es él. Representa el Hollywood de los años dorados.
ResponderEliminarComo diría mi madre: este es un hombre hombre. Què guapo!!
ResponderEliminarBesos (uno para tí y otro para él ;)
Hola Anónimo: Como prototipo de belleza masculina, le prefiero a él antes que a Clark Gable, aunque como actor creo que hay varios mejores. Me gustaba más un poco mayor que demasiado joven, aunque en esta foto está genial.
ResponderEliminarSaludos
Hola María: No me pico si a él le das dos, jaja! Lo comprendería.
ResponderEliminarBesos
Que regalazo de imágen!!!!
ResponderEliminar¿Para cuando la entrada completa? Es para preparar las gafas de sol.
Besos
Ahora, en los tiempos que nos ocupan, ningún pavo se pone el cigarrillo en los labios como Cooper, nadie monta a caballo como Wayne, ni anda como Mitchum, ni mira a una chica como Gable, ni se viste una gabardina y un sombrero como Bogart, ni seduzze a una prinzzesa como Peck o besa a una bruja rubia de zzapatos rojos como James Stewart.
ResponderEliminarEn aquella época las estrellas que brillaban en el Olimpo de los Dioses eran doradas y el aire olía, siempre, a madreselva.
Besos, Elvira
Caperuzzita Fumándose un Zzigarrillo como Cooper.
Possdata: Nunca más nadie llevo un traje como Holden ni caminó hazzia la muerte, con las botas puestas, como él
(es que se me había olvidado Holden, por eso lo pongo en la Possdata)
Es verdad, Caperuzzita, ahora no se ven estrellas tan brillantes como las de esas épocas doradas del cine.
ResponderEliminarBesos,
Elvira mirando embobada a Gary Cooper
No sé, Ofelia, pero ayer ya empecé a recopilar imágenes... Ve preparando las gafas de sol. :-)
ResponderEliminarBesos
Pues sí, se lo merece. Una fotografía muy buena.
ResponderEliminarA ver qué tal me sale la entrada...
ResponderEliminarguapísimo, Elvira¡¡¡
ResponderEliminarme quedo con el comentario de Caperuzzita... también tengo la sensación de que en aquella época había estrellas, que brillaban rutilantes¡¡¡ ocupando toda la pantalla y traspasándola¡¡¡
¿por qué ahora no me parece igual?
besos para los tres ¡¡¡
Yo creo que ahora no hay estrellas tan glamurosas, el por qué, no lo sé.
ResponderEliminarBesos
¡Uf, qué hombre!!!
ResponderEliminarYo también prefiero a Cooper antes que al Gable, que tenía unas orejas de suplillo horribles!! Gary Cooper es guapo, elegante y todo un caballero ¡vamos, el hombre que todas querríamos!!
Supongo que el glamour del Hollywood de aquellos años, tanto de ellos como de ellas, se debe al atractivo de las escenas y a que las historias que contaban giraban en torno a vidas o acomodadas o de héroes y heroínas, vidas intensas y apasionadas, tan distintas a lo cotidiano del mundo que nos rodea.
PD: Yo también me traigo las gafas para cuando vengan las demás, que me huelo que van a ser de infarto!
Besitos ^_^