Este título nombra dos de mis principales intereses, pero hay más: la música, el arte, la psicología, y todas las profesiones u oficios que contribuyen a mejorar las condiciones de vida o el entorno.
martes, 20 de octubre de 2009
Edward Hopper: Room in Brooklyn
Room in Brooklyn (1932), de Edward Hopper, Boston Museum of Fine Arts
Hola Leo: Mirar por la ventana y pensar en sus cosas. Ganchillo creo que no, tendría otra postura corporal, me parece. Leer podría ser, pero entonces no tendría tanto sentido sentarse justo delante de la ventana. Yo cuando leo no necesito vistas. :-)
Acaba de amamantar a su bebé. No le vemos los pies al bebito porque es un recién nacido y lo tiene ligeramente incorporado. El niño se ha quedado dormido desde el primer trago, siempre ocurre igual ante la tibieza que ella emana. Tiene que estimular su boca para que siga comiendo y ella se pregunta si lo estará haciendo bien y si le llegará. Los minutos transcurren de un modo extraño. Todavía los supone tan lentos como para buscar entretenimiento frente a una ventana, sin darse cuenta que ya los vive con la fugacidad que da el amor extasiado. Por eso pasa tanto rato mirando a su hijo después de darle de mamar.
Son cinco tomas al día frente a una ventana... que apenas es capaz de mirar.
O eso, o acaricia a un gato o tiene tortícolis :-)
Besos
(Con mi conexión a velocidad de mono lento cuando consigo pegar esto ya habeís escrito más.)
Yo creo que se ha quedado dormida, por la inclinación de la cabeza. Se sentó delante de la ventana, más que a mirar por ella, a pensar. En su soledad, a rebuscar en su interior mientras sus mejillas recibían los últimos rayos de sol y la reconfortaban con su calor. Entonces se quedó dormida, cansada de su propia inactividad.
¡Cada vez veo los cuadros más tristes! o tal vez es culpa mía y no de nuestro querido Hopper, ese artista que llama a la creatividad y nos hace ver más allá de su obra.
Me pregunto si el significado real de el cuadro es el de simbolizar que ella es "una mujer florero" (es el protagonista), y a fin de cuentas ella parece tener un rol pasivo, observando por la ventana lo que pasa ajeno a ella
¿Tú que crees que está haciendo ella? ¿Leer, ganchillo, dormitar, mirar por la ventana?
ResponderEliminarHola Leo: Mirar por la ventana y pensar en sus cosas. Ganchillo creo que no, tendría otra postura corporal, me parece. Leer podría ser, pero entonces no tendría tanto sentido sentarse justo delante de la ventana. Yo cuando leo no necesito vistas. :-)
ResponderEliminarTiene los brazos apoyados en el balancín y la cabeza ligeramente inclinada hacia delante.
ResponderEliminarParece ser que está esperando pacientemente a que la inquilina del penúltimo piso del edificio de enfrente entre en casa.
Hace tres años que lo hace, ya es un ritual. Pero, porque?
Hola Ofelia: Es su hija secreta. :-)
ResponderEliminarAcaba de amamantar a su bebé. No le vemos los pies al bebito porque es un recién nacido y lo tiene ligeramente incorporado.
ResponderEliminarEl niño se ha quedado dormido desde el primer trago, siempre ocurre igual ante la tibieza que ella emana. Tiene que estimular su boca para que siga comiendo y ella se pregunta si lo estará haciendo bien y si le llegará.
Los minutos transcurren de un modo extraño. Todavía los supone tan lentos como para buscar entretenimiento frente a una ventana, sin darse cuenta que ya los vive con la fugacidad que da el amor extasiado. Por eso pasa tanto rato mirando a su hijo después de darle de mamar.
Son cinco tomas al día frente a una ventana... que apenas es capaz de mirar.
O eso, o acaricia a un gato o tiene tortícolis :-)
Besos
(Con mi conexión a velocidad de mono lento cuando consigo pegar esto ya habeís escrito más.)
Hola Chusa: es que a ti te pierden los terneros, jaja! No sé por qué me la imagino más con un gato que con un bebé.
ResponderEliminarNo, hoy está la cosa muy tranquila, ha habido pocos comentarios. Besos
Ay, me encanta esto de jugar con el cuadro...
ResponderEliminarA mí también, pero hay algunos que me inspiran más que otros.
ResponderEliminarParece que va de hijos y bebes...
ResponderEliminarBesos maternales
Es verdad, jaja! Besos, Ofelia!
ResponderEliminarPues yo diria que esta pensando en sus cosas ,o quizas leyendo.
ResponderEliminarEsa ha sido mi primera impresión, Odel, pero luego me voy metiendo en las distintas historias que me sugieren. :-)
ResponderEliminarYo creo que se ha quedado dormida, por la inclinación de la cabeza.
ResponderEliminarSe sentó delante de la ventana, más que a mirar por ella, a pensar. En su soledad, a rebuscar en su interior mientras sus mejillas recibían los últimos rayos de sol y la reconfortaban con su calor. Entonces se quedó dormida, cansada de su propia inactividad.
¡Cada vez veo los cuadros más tristes! o tal vez es culpa mía y no de nuestro querido Hopper, ese artista que llama a la creatividad y nos hace ver más allá de su obra.
Besos.
Si me duermo yo, se me cae la cabeza mucho más y me despierto seguro.
ResponderEliminarHay soledad y tristeza en muchas de sus obras, es cierto.
Besos alegres
¡Pero qué maravilla! Creo que ya tengo nuevo Hopper favorito.
ResponderEliminarEn tu escenario seguro que la mujer está leyendo, ¿no? ;-)
ResponderEliminar¡Jajaja! Por supuesto :D
ResponderEliminarFantaaaaaaaaaáaaaaastico!, no lo conoccía.
ResponderEliminarMe pregunto si el significado real de el cuadro es el de simbolizar que ella es "una mujer florero" (es el protagonista), y a fin de cuentas ella parece tener un rol pasivo, observando por la ventana lo que pasa ajeno a ella
¡Anda! Qué visión más original, Femme. Yo también la veo muy pasiva, más que descansando, es cierto.
ResponderEliminar^__^