Fruta, flores y La Danza (1909), Hermitage.
Ramo en jarrón con dos asas (1907), Hermitage.
Bodegón español/Sevilla II (1911), Hermitage.
Ramo de flores en la veranda (1912)
La Danza con capuchinas (1912)
Jarrón de lirios (1912), Hermitage.
La cama en el espejo (1919), colección privada.
Las margaritas (1919)
Torso de yeso (1919), Museu de Artes, Chateaubriand, Brasil.
Amapolas (1919), Detroit Institute of Arts.
Ramo de dalias y libro blanco (1923), The Baltimore Museum of Art.
Rosas amarillas con jaula de periquitos (1924), Columbus Museum of Art.
Piña y limones (1925)
Margaritas (1939)
Naturaleza muerta con magnolia (1941), Museo Nacional de Arte Moderno, Centro Pompidou.
Anémonas en un jarrón (1943)
Jacintos y limones, con fondo de flor de lis (1943)
Cuentan que Matisse dijo que el arte debería estar desprovisto de temas deprimentes, que debería ser algo así como un buen sillón en donde descansar de la fatiga física. (
Página consultada).
y las flores son de verdad un buen sillón, descansas la vista y el espíritu.
ResponderEliminarPor eso tu blog es como un momento de paz en el ir y venir del tiempo.
Un besico
Hola Elvira,
ResponderEliminarQue maravilla todas las entradas que tienes con pinturas de Matisse, son una alegría para la vista, la selección de flores de hoy son una preciosidad
Un abrazo
Hola Pili:
ResponderEliminarQué buen sillón, sí. Estoy bastante o muy de acuerdo con Matisse, ya la vida trae dificultades, pues que el arte nos reconforte. Para mí la literatura es otra cosa. Me alegro de que mi blog te dé paz. Besicos
Hola Pilar:
Me alegra que te gusten, hace unos días que iba recopilando hasta que hoy he dado la tarea por finalizada. Un abrazo
¡Elvira! No sé cuándo podré volver a visitarte, pero gracias por estos cuadros tan estupendos, gracias!!
ResponderEliminarUn beso
Mina
¡Hola Mina! Pensé que no sabría de ti hasta tu vuelta, qué gusto verte por aquí. Besos
ResponderEliminarYo tenía debilidad por el de las amapolas que vi en la expo del Thyssen de Madrid, pero ahora le han salido cometidores. ¡Qué bonitos!
ResponderEliminarEl de las amapolas es muy bonito, realmente, pero sí que tiene competidores! :-)
ResponderEliminarEl que no consigo, y he rastreado la red, es el de la mujer de espaldas a la ventana desde donde se ve el mar, en Niza. Sólo tengo una reproducción chiquita. Y eso que he mirado cantidad de páginas!!! Me encanta.
¿Quieres que te lo escanee? (A medio plazo, eso sí...) Es muy bonito, desde luego.
ResponderEliminarAh, pues encantada, sin ninguna prisa, por supuesto. ¡Gracias! :-)
ResponderEliminarPues en cuanto vuelva a la rutina será una de las primeras cosas que haga :)
ResponderEliminarHola Elvira,
ResponderEliminarComo siempre nos descubres hermosas pinturas.
Antes de mirara tu blog poco conocía de Matisse. Clavada en mi memoria sólo está la idea de pinturas con tonos rojo y tierra de temas con mujeres del Pacífico.
Me han gustado mucho estos bodegones. No se parecen a la idea que tenía yo. Han sido una sorpresa.
Cuídate mucho.
Besos.
Se me olvidaba: interesante la reflexión de Matisse sobre el arte.
ResponderEliminarCHAO
¿No te referirás a Gaugin? Lo digo por las mujeres del Pacífico.
ResponderEliminarMe alegro de que te haya gustado la selección. Besos
nooooooooooooooo, si vas a lograr que termine encantándome Matisse!
ResponderEliminarjajajja. Nunca le había prestado demasiada atención. Me encanta que me saques de mi error. La verdad que tiene su punto
^_^
Me alegro, es estupendo tener más cosas que disfrutar, jaja! Besos
ResponderEliminarHola Elvira,
ResponderEliminarSí, era Gaugin. Ya te he comentado que yo de arte nada de nada.
Besos
Cuando no hay tiempo más que para aquello a lo que uno se dedica, no hay tiempo para más, y ya está. A mí también me pasó durante bastantes años. ¡Pero no veas lo que estoy aprendiendo de arte en otros blogs!
ResponderEliminarBesos
Onde esta exposta essa linda obra?
ResponderEliminarExtremamente linda!
No lo sé, David. Lo siento.
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